El Passetto di Borgo

Desde hace siglos, los Papas, en caso de que peligrasen sus vidas, podían huir de los palacios vaticanos a través de un pasadizo secreto de 800 metros de longitud y unos diez metros de altura que los llevaba hasta la fortaleza de Sant'Angelo. Este pasaje lo mandó ampliar el papa Nicolás III en 1277 y se construyó en el interior de una antigua muralla. Se conoce con el nombre de Passetto di Borgo, o simplemente Passetto. 

El origen de la muralla del Passetto se remonta a mediados del siglo VI. Dichas partes fueron construidas por orden de Totila durante la guerra Gótica. En la actualidad, sólo se conservan unos pocos bloques de piedra de esta primitiva estructura. Después, esta muralla se fue ampliando. El papa León IV, en el año 852, tras el saqueo de los sarracenos, protegió la ciudad con una muralla de tres kilómetros de largo y 46 torres. 

Desde el exterior se ve la muralla a veces simulando un acueducto pero, por dentro, es una larga galería, que en varias ocasiones actuó como una vía de escape para los papas en peligro. 

El papa Alejandro VI lo tuvo que cruzar cuando Carlos VIII de Francia invadió la ciudad en agosto de 1494. 

También el papa Clemente VII, enfrentado a Carlos I de España, escapó a la seguridad del Castillo de Sant'Angelo a través de este pasaje cuando las tropas del monarca español saquearon Roma en 1527 y masacraron a la Guardia suiza. El castillo se convirtió en la prisión del Papa durante siete meses. Para conseguir su libertad se le pidió una capitulación formal y el pago de 300.000 ducados. 

Tras la ocupación de Roma por el Reino de Italia en 1870 el Passetto quedó en desuso al perder el papado el Castillo de Sant'Angelo. Permaneció cerrado y en avanzado estado de deterioro hasta que el papa Juan Pablo II decidió reconocer la soberanía italiana sobre el Passetto. Mediante el pago de un alquiler simbólico, la Santa Sede retiene bajo su control los primeros ochenta metros del Passeto que salen del Vaticano, para proveer su seguridad. 

Tras ser restaurado por el estado italiano, fue reabierto el 11 de noviembre de 1999, siendo permitidas las visitas durante el verano. 

En la ficción podemos ver como Robert Langdon y Vittoria Vera utilizan el Passetto como un acceso directo a la Ciudad del Vaticano en la película Ángeles y Demonios. También aparece en el videojuego Assassin's Creed 2 donde el protagonista, Ezio, lucha a lo largo de él desde el Castillo hasta la Capilla Sixtina. Sin embargo, en el juego el Passetto está mal colocado a lo largo de las orillas del río Tíber.